Si un día Aitor pensó
al ver a Berta que era la chica más guapa de la fiesta, ¿qué se le pasó por la
mente al verla llegar esa mañana del 24 de Octubre?
En una bonita finca,
a pocos kilómetros de Zaragoza, familia
y grandes amigos de los novios les arroparían en el día que tanto esperaban: su
nueva etapa con muchos planes de futuro.
Un largo pasillo
recorrerían Aitor y su madre y madrina y poco después, Berta y su padre
acompañados de sus sonrientes sobrinos.
Si tuviera que resumir
lo que aconteció en la ceremonia fue simplemente SINCERO y DE CORAZÓN. Palabras
que llegaban a los mayores y a los más pequeños, pues el amor no entiende de edad.
Un lujo para todos los
asistentes escuchar las historias y anécdotas de su bonita relación. Porque la SENCILLEZ y NOBLEZA les hace a Aitor y Berta grandes personas y grandes amigos.
La mejor sensación que
puedes llegar a sentir en un día tan importante y deseado es observar, entre muchas personas que hablan,
ríen, se reencuentran o trabajan para que todo salga perfecto, que Aitor y
Berta tienen tal complicidad que hacen que todo se detenga, sin pararse a ver
qué sucede a su alrededor cuando juntos compartían confidencias.
Y aunque las horas en
un día como éste pasan muy deprisa, hubo tiempo para cantar, brindar,
inmortalizar momentos muy divertidos, bailar al ritmo de animadores, sorprender
a los novios y celebrar que la boda de Aitor y Berta ha sido muy especial.
¡GRACIAS, GRACIAS Y GRACIAS!
No hay comentarios:
Publicar un comentario